Hoy toca hablar de la película bélica que actualmente está en los cines. Dunkerque es un drama bélico bastante alejado de la clásica película bélica de acción en la que hay tiros por doquier. Dato curioso de esta entrada: al ser un hecho histórico voy a dar por sabidas ciertas cosas, por lo que no os sorprendáis con "spoilers".
La escena inicial es brutal, no se ni cuánto tiempo están los personajes sin mediar palabra, pero creo que sobrepasa los dos minutos. Las palabras no son necesarias para que el espectador se empape de la desesperación de los soldados británicos, completamente rodeados por los alemanes.
Como nota curiosa de este largometraje, no se ve a soldado alemán alguno en casi toda la proyección. Me refiero a soldado porque sí que es cierto que los aviones (tanto aliados como del eje) juegan un rol fundamental a lo largo de la película. Éste es uno de los detalles que hacen de Dunkerque una película diferente.
Otro detalle que hace única esta película es la multitud de frentes o puntos de vista que tiene. Tres partes que se intercalan las unas a las otras y cuyas tramas están son, hasta cierto punto, independientes. Se nos presentan tres historias diferentes cuyo único nexo de unión es la playa de Dunkerque.
Un ritmo más que apropiado para esta película. Si hubiese habido más acción, más diálogos de los que ya hay o cualquier otro detalle, probablemente la película se hubiese malogrado. Todos los detalles cuentan, incluso aquellos que parecen nimios.
En definitiva, una obra maestra del cine bélico, tanto por su originalidad para con otras tantas películas de la Segunda Guerra Mundial como por la infinidad de detalles que tienen mucho trasfondo.
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