El instante más oscuro


El segundo drama bélico que, curiosamente, trata el mismo tema. El año pasado vimos el rescate desesperado en Dunkerque y este año vemos la historia desde el otro lado, desde el lado político que tuvo que vivir Winston Churchill. Aunque se que no lo es, me gusta pensar que El instante más oscuro es una especie de precuela de Dunkerque.

Antes de adentrarme en las profundidades del argumento, he de pararme ante Gary Oldman. Me encuentro ante un actor cuya calidad interpretativa me gusta mucho. A pesar de que lo conocí bastante recientemente gracias al papel de Sirius Black, fue como James Gordon que realmente me cautivó. Sabiendo muy bien su perfil interpretativo me gustó mucho el saber que Churchill sería interpretado por Oldman. Gary riza el rizo de la interpretación en este largometraje; me parece que su actuación es digna merecedora de ser recordada. No solo en lo concerniente a lo que dice, sino a cómo lo dice y a su gesticulación. Además, su caracterización me ha parecido brillante.

Pero bueno, vamos a lo que más os suele gustar saber: el argumento. Todo el mundo sabe qué es un drama, si bien no siempre es fácil asociarlo a una situación beligerante como lo fue la II Guerra Mundial.

El argumento trata de la curiosa manera en la que Winston Churchill se convirtió en el primer ministro británico. La manera en la que lo hizo, como podréis imaginar, no fue la óptima, y la verdad es que tuvo que tomar muchas decisiones en un lapso de tiempo muy corto. La situación era límite, todo dependía de dos frentes diferentes; y uno de ellos era Dunkerque.

Los días y las horas se antojan cada vez más dramáticos con una puesta en escena cada vez más oscura y siguiendo la lógica de aquel momento. Incluso Churchill, a quien pintan de no dar su brazo a torcer ante nada ni ante nadie, parece flaquear más a cada minuto.

Una de las cosas que más me gusta de estas dos películas es que he aprendido mucho de la importancia de dicha batalla. Soy muy consciente de que son películas "basadas" en hechos reales, pero imagino que la realidad no pudo ser mucho más diferente de lo que en estos largometrajes se nos presenta. No recuerdo haber estudiado esa batalla en concreto cuando allá por secundaria y bachillerato estudié la II Guerra Mundial, cosa que ahora se me antoja rarísimo no haber hecho.

Del mismo modo que en la película varias veces citada, en este largometraje no se nos muestra en momento ninguno a personajes alemanes, exceptuando las filmaciones que se reproducen en ciertos momentos. No obstante, este hecho no es tan impactante como en Dunkerque, puesto que este argumento se centra mucho más en la política de un país en guerra y no tanto de la guerra en sí.

En definitiva, una película que deberías ver. Lamentablemente ya no es posible verla en la cartelera de mi cine habitual, pero tal vez en las salas de cine de tu ciudad sí lo esté. Y si no quieres verla en el cine, espera unos meses y seguro que aparecerá en tu web de streaming habitual.


The disaster artist


Como ya me pasara hace un año, me ha costado casi un mes hablar de la película con la que cerré el año. En este caso es algo razonable, puesto que es un tanto difícil hablar de esta película desde un punto de vista objetivo.

The disaster artist habla básicamente de cómo se rodó la peor (o la mejor, depende de gustos) película de la historia de Hollywood. Con los hermanos Franco como protagonistas, imagino que será bastante fiel a la situación real que vivieron los protagonistas de la película "The Room".

Sin embargo, he de confesar que la película me parece un suplicio. Escenas largas con poco argumento seguidos con una trama que no me terminó de convencer se juntaron para hacer una película difícil de admirar. Ya digo que no creo que sea una mala película porque está basado en hechos reales y posiblemente hayan querido ser tan fieles a los hechos que habrán reproducido las mismas situaciones surrealistas que se vivieron por aquel entonces.

A James Franco le he visto muy bien en este complicado papel. Está claro que interpretar a Tommy Wiseau no debe ser en absoluto fácil, pero en las escenas de créditos se aprecia claramente como algunas escenas de la película original se rodaron exactamente igual en esta versión. No nos olvidemos de que estamos ante una película de cómo se rodó una película.

En definitiva, una película que no puedes dejar de ver aunque si conoces un poco de la historia de "The Room" sabrás de antemano que te encontrarás ante un producto muy bizarro.

Dando la nota 3


Finalmente esta saga cinematográfica tiene su capítulo final. Empezó entreteniendo con un mínimo de calidad, pero ya en la segunda la calidad bajó de manera estrepitosa. Podrían haberlo dejado ahí, la verdad. Pero al menos a la hora de realizar la tercera parte han tenido la decencia de dar carpetazo a la saga, de modo que no haya tentación posible de hacer una cuarta entrega.

Me encantaría hablar largo y tendido del argumento de la película, pero de la hora y media de metraje poco hay donde se pueda rascar algo de argumento merecedor de ser comentado. Es más, me falta el argumento necesario para enlazar el segundo y el tercer acto. Las cantantes pasan de un extremo a otro sin que se nos diga por qué, del mismo modo que otros grupos musicales se desinflan debido a la misma incógnita. En una época en la que toda película se alarga con escenas accesorias... ¿acaso era tan difícil meterle diez míseros minutos de necesario hilo argumental?

En cuanto al poco argumento que se puede comentar... decir que me parece muy flojo. Un hecho que debería ser puntual termina siendo el hilo principal y no una mera anécdota graciosa y listo. Detalles de cómo algunos personajes se muestran en el desenlace son verdaderamente horrorosos y mejor se hubiesen quedado como hasta ahora.

Pero no todo lo llamativo es malo. Al menos la pseudo-profundidad del personaje protagonista evoluciona de un modo favorable. Además, el apartado musical (aunque esta película no la valoro como musical) es bastante aceptable.

En definitiva, una película que será recordada únicamente por dar carpetazo a lo que nunca tuvo que llegar a convertirse en trilogía.

El orígen de los guardianes


Como no podía ser de otro modo debido a las fechas que acabamos de pasar, hoy os traigo esta película. No es que sea una película navideña, pues de ello tiene la aparición de un Santa Claus un poco peculiar y poco más; pero el caso es que es una película que me suele gustar ver de vez en cuando por Navidades.

Una de las cosas que más me llama la atención de esta película es la caracterización tan original de los personajes.  Protagonizada por muchos personajes conocidos como pueden ser el ya citado Santa Claus, el conejo de pascua o Jack Frost (desgraciadamente traducido a Jack Escarcha) y otros no tan conocidos en la cultura popular de aquí, como es el Creador de sueños y el hada de los dientes (aunque el Ratoncito Pérez hace un cameo durante el largometraje). Éstos personajes (o al menos los que yo conozco, por lo que imagino que con el resto pasará lo mismo) distan bastante de la idea preconstruida que tenemos de ellos. De hecho, también hay otros personajes secundarios con un curioso rol.

Este hecho yo creo que viene en cierto modo por influencia de Shrek. No olvidemos que estamos ante una película de Dreamworks, y como bien dice en cartel que os presento, esta película viene de la mano de los creadores de Shrek. Dicha película es el anticuento por antonomasia, por lo que ningún personaje es lo que se presupone de él.

He de decir que los cinco actos que tiene se solapan uno detrás del otro con breves transiciones, lo que en este caso ayuda al argumento. Éste es bastante fluido y hechizante, de éstos que aunque no sea demasiado difícil saber qué es lo que va a ocurrir, simplemente disfrutas del desarrollo. No olvidemos de que es una película cuyos protagonistas son personas muy importantes de nuestra infancia y que por tanto el público en general los verá con admiración.

No obstante, el argumento no es tan simple como lo quiere aparentar, puesto que profundiza en los personajes lo suficiente como para la mayoría de éstos no sean planos. Me gusta el trasfondo que se les da a algunos de los personajes, en especial a Jack, a Norte (Santa Claus) y a Bunny (el conejo de pascua).

Como anécdota curiosa, decir que ésta película está basada en una serie de libros de William Joyce. En una entrevista, Joyce admitió haber creado este universo en el que todos estos personajes se unen cual liga de superhéroes por una pregunta que le hizo su hija. Si mal no recuerdo, la pregunta era algo así: "Papá, Santa Claus y el conejito de pascua se conocen, ¿verdad?". 

En definitiva, una película de la que nunca me cansaré. Adoro estos personajes fuera del canon habitual, y hay una especie de hechizo que me hace admirar la aparente simplicidad del argumento. 

Una vida a lo grande


La quise ver antes de terminar el año, pero no pudo ser. He aquí una dramática comedia que nos habla de muchas cosas razonables sujetas a un hecho que hasta el momento es completamente imposible: Reducir la vida humana (y muchos seres vivos) a un tamaño muy reducido.

Comenzaré diciendo que no le auguro nada bueno a esta película. Tiene un elenco de actores demasiado grande (y algunos cuyo caché imagino que será bastante elevado) para la taquilla que imagino que va a generar. Además, seamos sinceros, no es una buena película.

El argumento comienza con buenas intenciones en un principio... pero ya desde el comienzo del segundo acto se empieza a percibir una falta de motivación dentro de éste.  Los personajes se van arrastrando por un argumento muy flojo y cuyos únicos momentos cómicos son de una pésima calidad.

Matt Damon no está dentro de mis actores favoritos, y desde luego que si sigue haciendo películas del estilo "La Gran Muralla" o ésta que hoy os comento... se acercará a la opinión que tengo sobre Tom Cruise. Con esto no quiero decir que sea mal actor... es que simplemente acepta contratos de películas realmente malas.

El drama de la película es realmente deprimente. En ese aspecto, se podría decir que es de una buena calidad, ya que me da la sensación de que eso pretendía el director: deprimir al espectador.

En definitiva, una película que no merece la pena. Antes que ir a ver esto, te recomiendo que vayas a cualquier otra película. ¿Cuántos Razzies se llevará?

El gran showman


La película con la que empecé el año me sorprendió de muchos modos. Sabía que tendría carga musical durante el largometraje... pero no me esperaba un musical al uso. Se podría decir que es el La La Land de este año. En el trailer ya se intuía una escena musical (con el tema central de fondo), pero ni de lejos imaginé hasta qué punto la película sería de este estilo. Dicho todo esto, me encantó esta "sorpresa".

Una vez más nos hayamos ante una película basada en hechos reales, y los que me leáis bastante ya sabéis de sobra lo que me ocurre con éstas. El argumento nos presenta una historia que a buen seguro estará bastante edulcorada del que fuera "padre" del entretenimiento circense americano, P.T. Barnum.

El primer acto se presenta de un modo bastante caótico, con un ritmo excesivo para lo que el resto de actos nos mostrará, pero queriendo demostrar tal vez el ritmo acelerado del corazón de Barnum durante esos momentos. Del mismo modo que me pasó con La ciudad de las estrella, creo que hubo un porcentaje de minutos musicales excesivos, pues el resto de la película se centra más en el argumento. ¿Acaso todos los musicales tienen esta pauta de meter un porcentaje mayor de música al principio?

Ya en el segundo acto el argumento finalmente consigue centrarse y podemos ver que el argumento comienza a enriquecerse. Se muestra con gran claridad la personalidad astuta y pilla (O como dirían en La vida moderna, zorro), que es capaz de conseguir cualquier cosa que quiere mostrando verdades a medias o mintiendo directamente.

Durante el final de este segundo acto y ya durante el resto de la película aparece Zac Effron para callarme un poco la boca. Parece ser que sí que sabe interpretar y se ha desencasillado (o eso parece) del estereotipo del que le taché el año pasado con Los vigilantes de la playa. Cierto es que Zac saltó a la fama de manos de musicales Disney, pero en esta película le he visto muy suelto y con bastante nivel.

La carga dramática de la película me parece de una calidad bestial, aunque una vez más recalco que estoy seguro de que en cierto modo esto ha sido así porque creo que el personaje interpretado por un gran Hugh Jackman está bastante edulcorado. Un personaje con esa personalidad tiene un comportamiento que no me termina de cuadrar en ciertos momentos, especialmente en los actos centrales del largometraje.

Si me tendría que quedar con una escena, es la que incluye la canción central de la película. Esta escena es, de hecho, uno de los dos puntos de inflexión en el argumento. No volveré a ver esta película en el cine, pero si lo hiciese tened por seguro que sería para verla a partir de esta escena.

En definitva, una película edulcorada que muestra un argumento precioso con una gran carga argumental y con temas musicales en los momentos más memorables del metraje. Buen comienzo de año.