Una gran película basada en una historia real... en la medida de lo posible, como la misma película lo admite. Obviamente, de una historia que se mantuvo secreta hasta hace menos de 20 años no puede tener mucha base real.
La historia habla sobre los años finales de una de las reinas más míticas de la corona británica, la reina Victoria. Parece ser que conoció a un sirviente indio y que entabló una bonita historia de amistad con él.
El argumento me parece muy bien hilado y llevado, teniendo un ritmo más que aceptable y viéndose claramente los diferentes actos, a cada cual más interesante. Aunque el desenlace es bastante obvio, no desmerece el largometraje, pues lo importante aquí es el cómo se llega a ese punto. Ahora bien, se ha de suponer que gran parte la película es ficticia.
El reparto de la película es realmente bueno. Una grandísima Judi Dench borda su papel como reina, y el resto del reparto danza a su son. No he visto actor malo ni mala interpretación a lo largo de este largometraje.
En definitiva, una película que merece ser vista. Quién sabe qué hay de cierto y qué de ficción en esta proyección.
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