Largometraje biográfico de la vida de Jacques Cousteau, el legendario explorador marítimo francés. De pequeño, cuando me veía muchos documentales del National Geographic sobre los océanos y los tiburones, repitiéndolos muchas veces, creé una especie de simpatía por Cousteau y por Eugenie Clark.
Curiosamente, esta película me has servido para ver mi completa ignorancia sobre la vida de Jacques, por lo que me ha servido para ver un poco su faceta más oscura, en la que se centra el largometraje.
Tampoco diré que se me cae un mito de mi infancia, porque es normal que en documentales del National Geographic no se hable de la vida de los científicos y exploradores, por lo que tampoco me esperaba que su vida fuese perfecta y maravillosa.
Como buena película biográfica, su ritmo es muy lento. Ahora bien, el inicio de la película me confundió un poco, puesto que creía que iba a moverse simultáneamente en diferentes momentos históricos, pero no fue así, siendo casi todo el largometraje una especie de flashback, repitiendo incluso una escena.
Película que no puede dejar indiferente a nadie y que, lamentablemente, no será nunca muy popular. El mensaje que transmite la película es muy obvio y positivo, por lo que debería ser mucho más vista y difundida que cualquier otra de las películas que se pueden ver en cines como Cinesa Urbil (Usurbil), Yelmo Boulevard (Vitoria),y demás salas donde proyectan únicamente cine comercial.
En definitiva, una película que a todo el público le gustará por no ser comercial, pero que tiene un gran mensaje que debería ser escuchado por todos. Muchas gracias, Jacques.
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