Largometraje basado en una historia real que he visto casi de casualidad. Y digo casi porque, habiendo leído el título de la película me entraron ganas de verla pero realmente no tenía la menor idea de qué era lo que iba a ver.
Como todas las películas basadas en hechos reales, tiene un argumento muy trabajado. Un ritmo lento, necesario para el buen desarrollo del largometraje, va mostrando cómo el protagonista, que ha llegado a la Amazonia casi de rebote y sin quererlo mucho, termina siendo atraído completamente hasta el punto de convertirse en una obsesión.
El contexto histórico también ha sido muy bien tratado. Se respetan mucho los tiempos y, de hecho, se me ha hecho cuanto menos llamativo que aparezca en un periódico el casus belli de la I Guerra Mundial. A pesar de saber que tarde o temprano iba a llegar durante la proyección, yo me imaginaba un titular de periódico del estilo "Guerra" "El Imperio en guerra" o algo así. Desconozco completamente si el titular que hoy he visto es histórico o no, pero de serlo es como para tenerlo muy en cuenta.
En la parte de actores, he de quitarme el sombrero ante Robert Pattinson. Es un actor que personalmente no valoro demasiado por su participación en una saga cinematográfica que no me gusta en absoluto y que desde entonces no he visto en la gran pantalla ni me parece que haya tenido mayor trascendencia mediática. Sin embargo, en esta película borda el papel que desempeña. Además, ese cambio de look le ha dado un nuevo registro en el que puede llegar a protagonizar películas de una calidad infinitamente mayor que otras películas crepusculares.
En definitiva, un nuevo hecho histórico desconocido para la gran mayoría del posible público contada de un modo muy respetuoso y con buenas interpretaciones por parte de gran parte del reparto.
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