La batalla de los sexos está basada en una historia real de bastante importancia hoy en día. Hasta hace bien poco lo más normal parecía ser la supremacía del hombre sobre la mujer, históricamente oprimida y ninguneada. Poco a poco esto va cambiando, pero todavía queda por hacer. De ésto podría hablar largo y tendido en mi otro blog (si no fuese porque finalmente me he decidido a no tenerlo activo); pero ahora es momento de centrarme en la película.
Argumentalmente hablando es una película con poco misterio. Ni intenta tenerlo ni lo necesita, al estar basada en hechos reales bastante conocidos por la sociedad actual. ¿Esto lo hace una mala película? No, o al menos eso es lo que pienso yo. Que un argumento sea obvio a veces es lo menos importante a la hora de valorar su calidad. En estos casos me quedo con la profundidad de los personajes, que en los dramas tiende a ser algo bastante importante.
¿Son entonces profundos los personajes? No demasiado. Tal vez por el ya sabido hecho de que es una historia real, o tal vez porque tiene toques de comedia, pero el hecho es que los personajes son más bien poco profundos, con poca evolución a lo largo del largometraje más allá del necesario para que la película tenga coherencia y cohesión.
En cuanto a los actores protagonistas del largometraje, he de decir que la actuación de Emma Stone no me pareció en absoluto brillante. La verdad es que es una actriz que, quitando La ciudad de las estrellas: La La Land, no me ha terminado de parecer digna de aparecer frecuentemente en la pantalla grande. Con esto no quiero decir que sea mala actriz (ni mucho menos), es que simplemente sus papeles me parecen de calidad bastante pobre.
En cuanto al otro protagonista, Steve Carrell, creo que este papel le viene muy bien dado, ya que a este actor lo relaciono mucho con la comedia desenfadada. Cierto es que también es dado a los dramas, por lo que esta película le viene como anillo al dedo a mi parecer. Si bien su personaje no creo que vaya a caer bien a nadie por lo machista que es, Steve hace muy buena interpretación a mi humilde modo de ver.
En definitiva, una película obvia y con poca profundidad, pero que será capaz de engancharte al asiento siempre y cuando desconozcas los detalles de la historia real en la que se basa el argumento.
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