Los chicos del coro

Segunda película francesa consecutiva en mi blog. Mira que no soy muy fan del país vecino, pero he de confesar que tienen una industria cinematográfica de gran calidad. Obtuvo dos candidaturas para los Oscar, aunque lamentablemente ninguna de ellas fue premiada.

Antes de nada, permitidme explicar el por qué la catalogo simplemente como drama, a pesar de que algunos medios la catalogan también como comedia y como musical. Cierto es que tiene toques cómicos y se canta mucho; pero la comedia es bastante esporádica y la música es parte del argumento, no parte inerte del largometraje. Es como pensar que Vaiana es musical porque también tiene canciones.

Un argumento muy trabajado en el que, quitando la escena de inicio y la final, pasa completamente desapercibido que todo es un contínuo flashback. Centrado en el personaje de Clément Mathieu (Gérard Jugnot), relata la dura existencia de un grupo de chicos en un internado de mala muerte localizado en un área rústica francesa en los lejanos años 40. A pesar de las dificultades, y de que Mathieu llega bastante deprimido a su trabajo como celador en ese internado, consigue inculcar su pasión en esos chicos: la música.

Se dice que la música consigue amansar a las fieras, y tal parece en esta película. Incluso el rebelde Pierre Morhange (Jean-Baptiste Maunier) se apacigua debido a que él mismo se da cuenta de su propio potencial. Eso no quita para que siga haciendo gamberradas.

Los personajes están bastante bien construidos. La gran mayoría de ellos son fundamentales en el argumento, incluso la oveja descarriada que inicia el desenlace de la película.

Hablando de desenlaces, bastante rápido el de esta película. Bien se podría haber alargado un mínimo el largometraje para darle un ritmo un poco más pausado. Una escena o dos más hubiese sido mejor idea.

En definitiva, una gran película francesa. Se podría considerar clásica, a pesar de ser bastante reciente (2004). Protagonistas para todos los públicos y un sinfín de emociones entremezcladas. Es necesario ensalzar que el propósito oculto de la película es el de convertir al espectador en una persona mejor.